El tamaño de los planetas (cont.)

Una vez visto que el tamaño de la Luna, de la Tierra y del Sol no son iguales, vamos a profundizar en el tamaño de los planetas.

Podría llenar estas páginas con datos como la masa, el diámetro o la composición de los planetas. La verdad es que el resultado sería soporífero. De hecho, Internet está llena de páginas con todo tipo de datos técnicos sobre los cuerpos celestes. Pero la filosofía de AstroFácil es justo la contraria. Queremos enseñar astronomía de forma clara y sencilla. Así que vamos a intentar una aproximación más gráfica y menos numérica.

A nosotros la Tierra nos parece enorme. De hecho, es tan grande que al Hombre le costó muchos miles de años comprender que era esférica en vez de plana. Pero, ¿cómo andamos de tamaño respecto al resto de planetas? Pues, como suele pasar en estos casos, depende de con quién nos comparen.

En esta foto tenemos a los planetas más pequeños del sistema Solar. Como podemos ver, la Tierra es el más grande de ellos. Venus, nuestro Lucero del Alba, tiene un tamaño parecido al de la Tierra. El más pequeño de la foto es Plutón que, desde hace unos años, perdió la categoría de Planeta. Para que nos hagamos una idea de su tamaño, Plutón es tres veces más pequeño que la Luna. De hecho, mucha gente considera a la Tierra un planeta binario, porque la relación de tamaño que hay entre la Tierra y su satélite es desproporcionada si la comparamos con otros planetas.

Visto esto, vamos a comparar el tamaño de nuestra “descomunal” Tierra con el resto de planetas del sistema Solar.

Impresiona, ¿verdad? Parece mentira que esos puntitos que vemos en el cielo y que parecen estrellas sean estos dos colosos: Júpiter y Saturno. Gracias a esta foto queda claro que el tamaño de la Tierra es insignificante si se la compara con otros planetas del sistema solar. Incluso los planetas más externos del sistema Solar tienen un tamaño considerable.

Llama la atención la inmensidad de Júpiter. Este coloso es un proyecto de estrella que se quedó sin finalizar (afortunadamente para nosotros, porque si hubiese llegado a convertirse en estrella, en la Tierra no habría podido surgir la vida).

Vamos a comprarlos ahora con el Sol y con otras estrellas del firmamento. Si te quedaron dudas sobre el tamaño del Sol, de la Luna y de la Tierra, las resolverás en un momento.

Previous Post Next Post